Mientras, en el Senado, no hay consenso.
Washington D.C. A pocas horas de que en la Cámara Baja los demócratas pasaran un nuevo paquete de ayuda por COVID-19 los estadounidenses se enteraron de que el presidente Donald Trump y su esposa Melania habían contraído el virus. Tras la impactante noticia surgió la pregunta sobre si esto afectaría la posibilidad de que se concrete una nueva ronda de estímulo económico.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo el viernes que el diagnóstico de coronavirus del presidente Donald Trump podría cambiar la forma de las conversaciones hacia un acuerdo de estímulo que ha sido esquivo, reportó CNBC.
“Esto cambia la dinámica porque aquí (los republicanos) ven la realidad de lo que hemos estado diciendo todo el tiempo. Este es un virus atroz ”, dijo la demócrata de California a MSNBC, y agregó que oraría por la seguridad del presidente.
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Antes de la noticia sobre Trump, aumentó el optimismo de que Washington podría superar su partidismo para brindar más apoyo a la economía, el paquete pasó a segundo plano. Sin embargo, incluso Pelosi dijo a las aerolíneas por la tarde del viernes que dejen de despedir a los trabajadores porque la ayuda para ellos es inminente. Dijo que un paquete de rescate más amplio para la economía, uno por el que los inversores han estado agitando durante mucho tiempo, también podría estar en camino.
Más tarde el viernes Pelosi, emitió una declaración después de que los republicanos de la Cámara bloquearon la consideración de una medida para brindar el alivio a decenas de miles de trabajadores de aerolíneas en riesgo inminente de licencias y despidos:
“El presidente DeFazio solicitó el consentimiento unánime para su proyecto de ley bipartidista independiente para extender el Programa de apoyo a la nómina. De manera decepcionante, los republicanos se opusieron a la legislación. Una y otra vez, los demócratas ofrecen legislación para salvar vidas y medios de subsistencia, solo para encontrar más obstáculos republicanos. O los republicanos no se toman en serio el desafío económico y de salud que enfrenta nuestra nación, o no les importa“, dice el comunicado.
Pelosi dijo que, si bien está triste al escuchar el diagnóstico del presidente, tiene la esperanza de que sea una transición hacia un enfoque más sano de lo que se trata este virus.
Antecedentes
La Cámara Baja de Estados Unidos aprobó el jueves con la oposición de la Casa Blanca un paquete de estímulo de $2.2 billones para hacer frente a la crisis derivada de la pandemia.
La propuesta quedó aprobada con 214 votos a favor y 207 en contra después de que 18 demócratas se opusieran al proyecto promovido por su partido. Se trata de una versión rebajada del proyecto que los demócratas aprobaron en mayo en la Cámara Baja, de 3.4 billones, que quedó estancado al no tener el apoyo ni de la Casa Blanca ni del Senado, dominado por los republicanos.
Los demócratas votaron este paquete mucho menos ambicioso por la presión de sus legisladores más moderados que buscan culpar ante el electorado a los republicanos de falta de voluntad negociadora. Esa rebaja de pretensiones, sin embargo, provocó que 18 demócratas se opusieran al proyecto, que no tiene posibilidad de salir adelante ya que ni el Senado ni la Casa Blanca lo respaldan.
El nuevo rescate incluye nuevos subsidios al desempleo, un nuevo cheque de estímulo para todos los ciudadanos y ayudas a sectores económicos estratégicos como la aviación, que el jueves inició despidos masivos al agotar los fondos previos.
Ante la propuesta de 2.2 billones de la oposición, la Casa Blanca ha puesto sobre la mesa un rescate de 1.6 billones. Uno de los puntos de desacuerdo son las ayudas para estados y municipios con problemas financieros que buscan aprobar los demócratas y que los republicanos rechazan. Pero todo esto fue antes de que Trump revelara que tiene el virus.
