Un hombre acusado de prender fuego a vehículos Tesla en Las Vegas permanecerá en prisión hasta su juicio por cargos federales de incendio provocado y posesión de un artefacto explosivo, dictaminó una jueza el lunes.
La magistrada federal Elayna Youchah concluyó que no se podían imponer condiciones de libertad condicional a Paul Hyon Kim, de 36 años, para garantizar la seguridad pública, alegando la naturaleza peligrosa de los delitos y afirmando que no se trataba de robo ni de simple vandalismo.
"Lo ocurrido en este caso fue mucho más violento y peligroso que esos actos. Los actos parecían tener la intención de infundir miedo", declaró Youchah.
La jueza también consideró justo afirmar que "la intención del acto era influir y potencialmente coaccionar a otros para que actuaran".
Las autoridades afirman que Kim lanzó bombas molotov contra vehículos y disparó varias veces en el estacionamiento de un taller de Tesla la madrugada del 18 de marzo. Nadie resultó herido.
Un video de seguridad reproducido en una conferencia de prensa policial la semana pasada mostró al sospechoso, vestido de negro y con el rostro cubierto, pintando la palabra "resistir" en las puertas de vidrio del taller.
El fiscal Jacob Operskalski afirmó que Kim representaba un peligro para la comunidad. Añadió que no estaba claro a qué se refería Kim al escribir "resistir" en las puertas.
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"Podemos suponer que el acusado se resistirá a las órdenes judiciales", declaró Operskalski.
Michael Becker, abogado que representa a Kim, calificó el ataque como un "delito contra la propiedad glorificado con connotaciones políticas" y afirmó: "La influencia indebida de Elon Musk (el director ejecutivo de Tesla) en nuestro gobierno federal es innegable".
Ha habido un repunte de ataques a propiedades con el logotipo de Tesla en todo Estados Unidos desde que el presidente Donald Trump asumió el cargo y designó a Musk para un puesto destacado en la supervisión del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental, que ha llevado a cabo despidos federales masivos.
Algunos de los casos más destacados han ocurrido en ciudades de tendencia izquierdista del noroeste del país.
Las autoridades afirman que un hombre de Oregon lanzó varias bombas molotov contra una tienda de Tesla en Salem, regresó al día siguiente y disparó contra las ventanas. En Tigard, un suburbio de Portland, se dispararon más de una docena de balas contra una sala de exhibición de Tesla, dañando vehículos y ventanas.
Un hombre de 70 años de Idaho fue arrestado el sábado por agresión con agravantes tras presuntamente chocar con su vehículo a un individuo que conducía una camioneta con banderas a favor de Trump durante una protesta en un concesionario de Tesla en un suburbio de Boise. El conductor de la camioneta se dirigió a un hospital, donde recibió atención médica y fue dado de alta.
La fiscalía de Colorado acusó a una mujer en relación con ataques a concesionarios de Tesla que, según las autoridades, también incluyeron bombas molotov lanzadas contra vehículos y la inscripción con aerosol "autos nazis" en un edificio. Por su parte, agentes federales de Carolina del Sur arrestaron a un hombre acusado de incendiar estaciones de carga de Tesla cerca de Charleston.
