MÉXICO - El mensaje pidiendo a la gente que se mantenga en su casa, se ha hecho más intenso en todo el país. Al igual que el rigor de las medidas adoptadas para tratar de disminuir la propagación del COVID-19.
"No habrá toque de queda ni sanciones", anticipa la jefa de gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
En la capital mexicana, Sheinbaum indicó que apelarán a la conciencia de la gente para que no salga a las calles, pero además esta misma semana cerrarán un 20% de las estaciones del Metro, Metrobús y Tren Ligero.
"Pues es ahí donde se da el mayor riesgo de contagio, mientras más gente reunida sin sana distancia más riesgo de contagio hay", detalla Sheinbaum.
La funcionaria aseguró que además harán más estricta la supervisión en las empresas que deberían de permitir que sus empleados se queden en sus domicilios.
Como parte de las nuevas medidas para disminuir la movilidad en Ciudad de México, a partir de este jueves y hasta nuevo aviso, todos los autos dejarán de circular un día de acuerdo al número de placas que traigan.
En casi la mitad de entidades de la república el uso de cubrebocas ahora es obligatorio, en Jalisco y Michoacán habrá sanciones para quien no lo use, al igual que para aquellos que no respeten el aislamiento.
"La fuerza pública tendrá la encomienda de hacerlas cumplir", afirmó Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco.
"La sanción consiste en realizar trabajo comunitario, llevar apoyo alimentario a grupos vulnerables; tareas para la elaboración de cubrebocas, hacer limpieza en hospitales y centros de salud", detalló Silvano Aureoles, gobernador de Michoacán.
Aunque algunos mexicanos no se dijeron convencidos de estos anuncios, la mayoría se sintieron tranquilos.
"Todo es bueno, todas las medidas, entre más sean mejor", considera Raúl Ornelas, uno de las habitantes de Ciudad de México.
"Está bien, porque si no nos obligan a hacer las cosas, vamos a andar afuera", opina Marcela.
Cada entidad será responsable de garantizar que sus habitantes cumplan con las disposiciones.