MÉXICO - La emergencia del COVID-19 ha causado una sobredemanda de insumos médicos, sobre todo de equipos de protección, por lo que fábricas mexicanas trabajan al triple, advirtió Rafael Gual, director general de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (Canifarma).
"Hay una sobredemanda donde se ha copado la capacidad de producción y se ha tenido que doblar y hasta triplicar turnos, y no acaba aquí, o sea, esto va a seguir. Hay empresas que están en 'back order', es decir, que tienen pedidos por mucho más de lo que pueden producir", indicó en entrevista.
México es el octavo productor de equipo médico a nivel mundial y el primero en Latinoamérica, según la Canifarma, que reporta una inversión anual promedio de 38,000 millones de pesos ($1,611 millones) en todas las especialidades del sector farmacéutico, con 93,600 empleados directos.
Al valorar en 200,000 millones de pesos ($8,501 millones) el conjunto del mercado farmacéutico y de equipo médico, Gual estimó un crecimiento del sector de hasta 6% para este año.
Aun así, subrayó que la crisis del coronavirus también representa un reto por la sobredemanda y el cierre de plantas en otros países, lo que deja un vacío en la importación de materias primas y otros productos.
"Es uno de los desafíos que implica que las empresas tengan que trabajar a marchas forzadas e, independientemente de eso, hay también escasez de materias primas en algunos casos. Todo esto impacta a la industria en México", apuntó.
SECTOR INDISPENSABLE
El representante de la Canifarma aseveró que la industria está ocupada en atender las necesidades nacionales pese a que México es el principal proveedor de estos productos de Estados Unidos, destino del 91% de las exportaciones.
"Lo que se está produciendo en México, se está quedando en México en este momento. México está enfocando sus baterías a cubrir lo que se requiere en el mercado nacional y lo que se va a necesitar en un futuro", afirmó.
El gobierno mexicano suspendió los sectores no esenciales la semana pasada al declarar la emergencia sanitaria por COVID-19, que ha causado 332 muertos y 5,014 en contagios en el país, según el reporte diario al 13 de abril.
Aunque la industria médica es esencial, la manufactura está tan interrelacionada, que se difumina esta línea, explicó Carlos Mortera, director para Latinoamérica de The Association for Manufacturing Technology (AMT).
Por ello, Mortera previó que habrá una reclasificación al tiempo que industrias que ahora están paradas, como la automotriz, podrían reconvertir líneas de producción para fabricar equipo médico considerado esencial, lo que ayudaría al sector.
"La demanda de producción de dispositivos médicos para la zona regional Norteamérica ha crecido en dobles o triples dígitos, obligando a que estén buscando más empleados, recursos y asociados que puedan trabajar en estas industrias", detalló el representante de la AMT.
ADMITEN DIFICULTAD
Al anunciar la compra de insumos médicos de China por más de $56 millones y de 5,272 ventiladores, el canciller Marcelo Ebrard admitió el jueves la dificultad de conseguir estos productos en el exterior.
"Los ventiladores, por ejemplo, hemos encontrado tres en el mercado que te pueden llegar a ocho, 10 veces, lo que cuestan en tiempos normales", comentó al argumentar la necesidad de la intervención de los gobiernos.