MÉXICO - Lanzaron globos al cielo y aplaudieron para honrarla, porque hasta en el último momento dio la vida por sus pacientes.
Olivia era enfermera y se contagio de COVID-19 tal y como le ha ocurrido a miles de trabajadores del sector salud en este país.
"Aquí tenemos los casos acumulados, son 32,388”, detalló José Luis Alomía, director de Epidemiología de la secretaría de Salud.
La dependencia reporta que desde que inició la pandemia casi 400 empleados han perdido la vida al realizar su labor; el 71% eran hombres.
Por ello, cada vez que alguno tiene una sospecha, dice el médico Miguel Rojas, quien sobrevivió al coronavirus, el temor se apodera de ellos.
"Es la incertidumbre porque puedes sentirte seguro de que sea un cuadro leve; sin embargo, estás a la expectativa de que pueda deteriorarse tu estado de salud", afirma Rojas.
La enfermera Lidia Rubio también vivió esta pesadilla.
"Para mí, el peor proceso de la enfermedad es el daño emocional y, luego, el físico, porque se te viene toda la incertidumbre saber cómo están mis hijas, mi familia; qué voy a hacer para pagar las cuentas, voy a salir, me voy a agravar, voy a usar oxigeno", dice Rubio.
A ella y a su pareja les dieron tratamiento y los aislaron, pero después llegó lo peor cuando ya sanos volvieron a trabajar.
"Todos te señalan, te ven como bicho raro, regresé a trabajar y todos no te me acerques, ponte el cubrebocas, nos vas a contagiar", recuerda Rubio.
Ante el peligro que representa esta pandemia entre el personal del sector salud muchos empleados deciden alejarse de sus familias y casas, y alojarse en lugares como un hotel donde los reciben.
Porque la emergencia aún no termina, y pese a los cuidados que ellos puedan tener, se espera que el número de contagios en este sector continuará aumentando.
